Sinopse
Como buen caballero ilustrado, Tomás de Iriarte también era músico, y dedicó buena parte de su producción poética a la didáctica de la música.En esta recopilación podemos encontrar letras de canciones, tonadillas en verso, como «La primavera», una tonadilla pastoril, «El lorito» o «Los gustos estragados».